El Centro de Reciclaje Solidario que Envera puso en marcha en 2016 en Madrid se ha convertido, por un lado, en referente del reciclaje solidario de maletas y objetos extraviados en aviones y aeropuertos y, por otro, en el corazón de una red de alianzas que esta organización sin ánimo de lucro ha creado con otras ONG y que ayuda ya a 25.000 personas y familias vulnerables dentro y fuera de España. Una iniciativa que ahora se refuerza con la puesta en marcha de un segundo Centro de Reciclaje Solidario en la delegación que Envera tiene en Barcelona.
Aunque Envera realiza una labor finalista en la atención de las personas con discapacidad, a las que acompaña a lo largo de toda su vida para que ocupen con dignidad su lugar en el mundo, gracias al Centro de Reciclaje Solidario se ha convertido también en una organización que apoya a más de una decena de entidades sociales como Cruz Roja, Cáritas, Mensajeros de la Paz, Escuela de Fútbol Vicente del Bosque (Senegal) Voluntarios por África – Mundo Justo (Etiopía), Grupo Talía Concertante, AUDE (Ruanda), Hombre nuevo tierra nueva (Cuba), Fundación San José o el Pato Amarillo, entre otras.
Un proyecto pionero de economía circular y creación de empleo
El proyecto está unido a Envera Punto de Inclusión, iniciativa pionera en Europa de reciclaje y economía circular desarrollada gracias a la RSC de Nuveen Real Estate (Islazul) y Carmila – Carrefour, donde se ponen a la venta los objetos extraviados a un precio solidario, y que ha permitido la creación de 12 puestos de trabajo para personas con discapacidad, tanto en los espacios de los centros comerciales Islazul (Madrid), Carrefour de la Imagen (Pozuelo de Alarcón) y Carrefour Prat (Barcelona), como en los Centros de Reciclaje Solidario.
Ambas iniciativas permiten a Envera y a las empresas que apoyan su labor impactar en once de los diecisiete Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030 establecida por la ONU.